Más que un simple oficio que pueda enseñarse y ejercerse, la restauración del patrimonio es una vocación que se inculca de alma a alma, y que debe sembrarse cual semilla en las nuevas generaciones.
Esta
semana, una delegación de la Organización de Naciones Unidas para la Educación,
la Ciencia y la Cultura (Unesco) y la Unión Europea constató los progresos de restauración del habanero
Convento de Santa Clara, próximo a convertirse en el Colegio Santa Clara para
la formación en las artes y los oficios de la restauración de Cuba y el Caribe.
Este
proceso de restauración de tan valioso espacio histórico se materializa gracias
a la colaboración de la Unesco, el Proyecto Transcultura (financiado por la
Unión Europea), y la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana. (Habana
Radio)