El 16 de noviembre de 2008, surgió la Compañía de Danza-Teatro Villa de San Cristóbal: regalo a La Habana en sus cumpleaños 489 y en consonancia con los propósitos del Proyecto Impulso, de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Nacía así una formación artística
que revitalizaría expresiones musicales y danzarias imprescindibles, en las que
confirman la cultura popular y tradicional cubana.
Desde entonces, la Compañía de Danza-Teatro Villa de San Cristóbal, liderada por el director artístico Rafael Pérez Gil, ha cumplido con su encargo social,
desde los festejos populares y el regreso de los personajes más auténticos de
las Fiestas de días de Reyes, eternizados
en los cuadros de Federico Mialhe y Víctor Patricio Landaluze.
El principal propósito de la entonces naciente agrupación fue regalarle a La
Habana una agrupación carnavalesca que retomara sus tradiciones y las reviviera
desde la contemporaneidad, siempre con las expresiones de la cultura popular y
tradicional como guía.
Hoy, justo cuando celebran sus
primeros 14 años, y La Habana sus 503, los integrantes de sus generaciones la
han visto crecer y convertirse en referente de calidad, disciplina y compromiso
con la identidad nacional.
Multipremiada en cada canaval habanero que ha vivido, la Compañía de Danza-Teatro Villa de San Cristóbal ha
sido bautizada como Reyes del color o
Magos de la noche, a partir de lo
vistoso de sus vestuarios, en los que predomina una amplia gama de colores, a
lo que se suma la versatilidad de propuestas presentadas al público que los
espera cada noche de paseo con un espectáculo diferente.
Premios a coreografías,
vestuarios, música, dirección artística y personajes fueron la sumatoria para
que en el Carnaval de 2019 (con el que La Habana celebró sus cinco siglos),
esta compañía se alzara con el Gran Premio.
Entre las muchas acciones que conforman la dinámica de trabajo de esta
formación músico-danzaria sobresale la ceremonia de Quema del Diablo.
Con esta, retoman una antigua tradición del carnaval habanero, con la cual
se han insertado en un movimiento internacional identificado como Cofradía de
Diablos, y en la que han interactuado con exponentes de Colombia, México y
Venezuela.
De esta acción, se han derivado
exposiciones colectivas en las cuales involucran a artistas de la plástica de
la Casa de Cultura del municipio de Diez de Octubre, como el grupo de creación
Mujeres Trabajando y el joven Carlos Gabriel Mantilla Fandiño, quien en los últimos
tiempos ha sido decisivo en la proyección plástica de Villa....
La llegada de la COVID-19 también hizo que los chicos del maestro Pérez
Gil rediseñaran sus acciones, multiplicándolas en vacunatorios y centros de
aislamiento, apoyando la labor del personal de salud en la capital cubana y alertando
a quienes más sufrieron en la etapa más tensa de la mortal pandemia.
EXPRESIÓN DE CONTINUIDAD
Los Villitas expresan la visión de futuro la Compañía de Danza-Teatro Villa de San
Cristóbal.
Esta formación consolida su propuesta,
en la que, desde la diversión, los niños aprenden de las tradiciones musicales
y danzarias, conocen de símbolos y personajes, al tiempo que se adiestran en el
manejo de los implementos que identifican a la compañía.
Mucho queda por decir de la Compañía de Danza-Teatro Villa de San Cristóbal, la misma que también fue distinguida con el Premio Memoria Viva (en la categoría Proyección Artística), que otorga el Instituto Cubano de Investigaciones Culturales Juan Marinello en reconocimiento a su labor de preservación y salvaguarda de las expresiones del carnaval habanero.
Otros elementos que hacen único
el espectáculo que lidera el maestro Rafael Pérez Gil son el trabajo de teatro
de relaciones, el colorido y los montajes coreográficos, en los que se logra un
diálogo armónico entre tradición y modernidad.
Unos llegan, y otros se van, como sinónimo de dialéctica en el quehacer
de estos artistas de pueblo. Quienes entraron más jóvenes peinan canas ya y
asumen otras responsabilidades en esta "familia" que ha logrado su
líder, con la que ha logrado cambios importantes en conductas y actuares: uno
de los aportes sociales que más aprecian los residentes en el habanero
municipio de Diez de Octubre y, en especial, del barrio Luyanó.
Por eso habrá Compañía de Danza-Teatro Villa de San Cristóbal para mucho tiempo más. (Digna Rosa Pérez Morejón)