Hoy en mi Habana

2 de febrero.

1806. Fue inaugurado el Cementerio Universal de La Habana, conocido como Cementerio Espada.

Con su construcción, se eliminó la costumbre de enterrar a los muertos en las iglesias, lo que constituía una acción no higiénica para la ciudad.

Este campo santo se localizaba en las calles de Aramburu, San Francisco, Vapor y San Lázaro.

En sus años de existencia, cobijó a nobles, ricos, pobres y usureros, sin distinción de origen. Su reglamento fue modelo de los que se redactaron con posterioridad para otros cementerios de Hispanoamérica.

 

1880. El doctor Carlos Juan Finlay Barrés propone en sesión de la Sociedad de Estudios Clínicos de La Habana la creación de una comisión que se dedique al estudio de la fiebre amarilla.

El mayor aporte de su genio a la medicina mundial está referido a la teoría del agente trasmisor de enfermedades infecciosas.

Esto le permitió descubrir la forma de propagación y control de la fiebre amarilla, el más terrible azote epidemiológico en Cuba en la segunda mitad del siglo XIX.

 

1887. Falleció en La Habana Mariano de los Santos Martí y Navarro.

Establecido en Cuba, se casa con Leonor Pérez Cabrera el 7 de febrero de 1852.

Al morir, su hijo se encontraba en Nueva York. En carta a su amigo, Fermín Valdés Domínguez, Martí expresa: “Mi padre acaba de morir, y gran parte de mí con él”.

 

1927. Nace en La Habana Miguel Saavedra Pérez.

Fue militante de la Juventud Ortodoxa. Fue destacada su participación en las manifestaciones contra la tiranía de Fulgencio Batista, tras el golpe de Estado del 10 de marzo de 1952.

Salió hacia México en 1956, año en que se unió a Fidel Castro y un grupo de jóvenes en la expedición del yate Granma.

Desembarcó el 2 de diciembre de 1956 en las cercanías de Playa Las Coloradas, en la zona oriental del territorio cubano.

Fue asesinado en la zona de Media Luna el 8 de diciembre de 1956.

 

1969. Fallece en La Habana el pintor Víctor Manuel García.

De su quehacer se encuentra uno de los cuadros más famosos de Cuba, creado en 1929, al que identificó con el nombre de Gitana Tropical.

Después, realizó una gira por varios países europeos y vivió durante algún tiempo en París, Francia.

Con posterioridad, retornó a su tierra natal.

Fue un sencillo y espontáneo pintor. Solía recorrer la zona de la Habana Vieja con sus pinceles. Sin cátedra oficial donde profesar, convirtió toda acera en institución, y cada muestra de sus obras en una especie de asamblea abierta.

 

1989. Queda inaugurado en La Habana el Museo de Arqueología.

En la institución, se exhiben elementos importantes de la arqueología cubana y de regiones del continente americano.

Allí se pueden observar exposiciones permanentes y transitorias que divulgan y fomentan el conocimiento del patrimonio arqueológico.

En colaboración con la Universidad de La Habana, el museo trabaja en el adiestramiento de estudiantes de las carreras de Historia, Filosofía e Historia del Arte. (José Pérez-Galdós Ortiz y ACN. Foto tomada de Pinterest)

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