La Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba (Parlamento) aprobó la Ley de Comunicación Social, primer texto de su tipo en la historia del país.
El documento recibió el voto unánime de los
diputados asistentes este jueves a la segunda sesión extraordinaria de la X
Legislatura del Parlamento.
Se trata de una ley que regula el sistema para la gestión estratégica e
integrada de los procesos de comunicación social en los ámbitos organizacional,
mediático y comunitario y establece los principios de funcionamiento para todos
los medios.
Al realizar la presentación del proyecto de Ley,
Alfonso Noya Martínez, presidente del Instituto de Información y Comunicación
Social, señaló que surgió de la necesidad de transformar la comunicación social
en el país y contribuir con mayor eficacia a fomentar la unidad nacional y
sustentar la defensa y continuidad del modelo de desarrollo socialista en un
escenario de guerra política, ideológica, económica y comunicacional contra la
Revolución cubana.
La aspiración, dijo, fue convertir en instrumento
jurídico la voluntad política expresada en acuerdos y documentos programáticos
de los diferentes congresos del Partido Comunista de Cuba (PCC) y su Primera
Conferencia Nacional, además de construir consensos entre lo académico, la
práctica profesional y la experiencia social en un campo que constituye la base
de las relaciones humanas.
A pesar de la ausencia de un antecedente
legislativo en la comunicación social, se encontraron referentes en el
pensamiento del líder histórico de la Revolución cubana, afirmó Noya Martínez en
la sesión, celebrada en el Palacio de Convenciones de La Habana.
Expresó que la propuesta ratifica el apego al mandato de la Constitución de
la República, respalda en el orden jurídico el papel trascendente de la
comunicación social en la sostenibilidad y prosperidad a la nación y acompaña
la decisión del Estado, que la asume como un pilar esencial de su gestión.
La norma, dijo, siguió el camino más democrático:
la creación colectiva, evidente en su redacción y particularmente en su
enriquecimiento en diversos momentos de consulta e intercambio con la
participación de más de siete mil 500 personas, incluidos estudiantes,
profesores universitarios, periodistas, artistas, comunicadores sociales,
profesionales y expertos en otras disciplinas.
A partir de esas propuestas y los análisis en el
Secretariado y el Buró Político del Comité Central del PCC, en el Consejo de
Estado y en el Consejo de Ministros, se modificó el 59,48 por ciento de la
versión precedente para dar lugar a un documento de mayor coherencia, solidez e
integralidad.
Reafirmó su pertinencia en función de establecer
el marco regulatorio que demanda la gestión del sistema de comunicación social
en el país y ampliar los horizontes para el ejercicio del derecho ciudadano a
la información, la comunicación y el conocimiento.
Esteban Lazo, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, elogió
el extraordinario trabajo del grupo redactor, de los asesores.
Informó que, por acuerdo del Consejo de Estado,
se había creado una comisión temporal para dictaminar sobre ese proyecto, grupo
que encabeza el diputado José Luis Toledo Santander.
Durante el rico debate que antecedió la
aprobación de la normativa, se hizo patente el apoyo del Parlamento al dúo
Buena Fe y a todos los artistas cubanos que defienden la Revolución en
cualquier trinchera, tanto en la arena internacional como desde las redes
sociales, donde encuentran manifestaciones de odio y provocaciones de apátridas
en una guerra no convencional.
El diputado Yoerkys Sánchez, director del
periódico Juventud Rebelde, resaltó la elaboración colectiva en la conformación
de la norma jurídica que no es gremial, sino que es para todos, actúa en el
ámbito comunicacional, mediático y comunitario e incluye a la publicidad y el
patrocinio que no están ajenos al modelo de comunicación socialista.
No solamente los delegados, sino que la población en su conjunto domine
estos elementos de la comunicación social, subrayó Lazo al señalar la necesidad
de que la estudie y la conozca.
Rosa MIriam Elizarde, diputada por Trinidad y
vicepresidenta de la Unión de Periodistas de Cuba, afirmó que es la primera ley
que tendrá Cuba en el campo de la comunicación, derivada de la Constitución, y
por eso es histórica, y desborda nuestra geografía, al ser la primera de
América Latina que trasciende varios sectores, al transversalizar diversos
ambientes de la sociedad y a sus actores.
Sin regulaciones en este ámbito, no es posible revertir los intentos de compañías extranjeras, en su mayoría norteamericanas, al dominar plataformas digitales globales, por tanto, es una gran fortaleza para la seguridad nacional, significó la periodista cubana. (Redacción digital. Con información de la ACN)