Solidaridad salva la vida de recién nacido en La Habana (+ fotos)


La solidaridad y el amor mueven montañas y libran batallas contra la muerte en los hospitales cubanos día a día.

Esta es la historia del bebé de Rosmery Durán, paciente del Hospital Docente Ginecobstétrico Ramón González Coro, de La Habana.

Ella, a solo horas de dar a luz, sufrió la peor pesadilla de una madre: su pequeño se puso intensamente amarillo por desarrollar una hemólisis grave que lo llevó a la terapia con peligro inminente para su vida, una complicación del Conflicto RH en un recién nacido con un tipo sanguíneo muy raro (parecido a lo que vive el personaje de Paloma con su hija en la novela Suerte de vivir).

Esa situación provocaba en el pequeño un rechazo agudo a la sangre.

Se trata de un evento que ocurre en menos del 1 por ciento de los neonatos y que en su caso coincidía con una variedad de sangre dificilísima de encontrar. Solo dos mujeres en Santiago de Cuba contaban con este tipo de sangre, y desde allá y sin escatimar esfuerzos para que llegara a fluir en las arterias y venas del bebito lo antes posible, llegó la vida, roja, rutilante, fresca, invaluable.

Otra vez la esperanza y la alegría inundaron el rostro de los padres; un color rosado y unos labios rojos volvieron al principito, y el alivio y la fe regresaron a las manos y corazones de los galenos y especialistas que atendieron el caso.

Vuelve el amor a unir a Cuba: desde el Oriente llegó la vida para latir desde las venas de una hermosa mulata cubana hasta el corazoncito de un hijo de #LaHabanaDeTodos, porque SOMOS UNA SOLA CUBA, y solo el amor engendra la maravilla.

Foto: Captura de video

(Tomado de Tribuna de La Habana)

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