La Semana de Acción contra los Mosquitos, del 19 al 26 de junio, constituye un esfuerzo para concientizar y trabajar con las comunidades sobre la relación entre esos insectos y las enfermedades que transmiten: dengue, chikungunya, Zika, sarampión y fiebre amarilla.
El barrio en transformación social Comodoro, del municipio de Arroyo Naranjo, acogió el acto provincial de La Habana con motivo de ese empeño promovido cada año por la Organización Panamericana de la Salud, esta vez bajo el lema Movida comunitaria por la salud y la vida.
En este escenario, se desarrollaron actividades educativas, lideradas por especialistas
de Promoción y Educación para la Salud, con un intercambio mediante preguntas y
respuestas para los pobladores, quienes ampliaron los conocimientos sobre el
control de los vectores.
También formó parte del componente educativo un buró de información, ubicado
en espacios de la comunidad, para los estudiantes de la escuela de enseñanza primaria Ángel "Machaco" Ameijeiras, quienes participaron en un concurso de dibujo relacionado
con el tema y en la recogida de muestras de larvas del Aedes aegypti,
determinada por el equipo móvil de Entomología de ese territorio.
Los pioneros ganadores recibieron sus premios, y se entregaron diplomas de reconocimiento a trabajadores destacados en la campaña antivectorial.
Más de una veintena de miembros de la Federación de Mujeres Cubanas, de los Comités de Defensa de la Revolución y jóvenes de la zona, involucrados en la transformación del barrio el Comodoro, fueron estimulados con el agradecimiento de los habitantes de la comunidad, por lo que se les entregó diplomas de reconocimientos.
La licenciada Tamara Bolaño, jefa del Departamento de Promoción y Educación para la Salud de La Habana, instó a los presentes a promover conductas responsables, individuales y colectivas, en la transformación de los escenarios que pueden constituir riesgo para la salud.
Por su parte, la doctora Gabriela Caballero Batista, especialista en Medicina General Integral, se refirió a la situación higiénico-epidemiológica del barrio, relacionada con las principales morbilidades.
Doctora Gabriela Caballero Batista, especialista en Medicina General Integral. |
Las condiciones medioambientales favorecen, en esta época del año, la evolución y reproducción del Aedes aegypti, principal agente transmisor de varias enfermedades mortales, por lo que constituye clave la participación activa de la comunidad en la prevención y el control de los mosquitos.
Datos clave
- Cerca de 500 millones de personas en las Américas están actualmente en riesgo de contraer dengue.
- El número de casos de dengue en las Américas se ha incrementado en las últimas cuatro décadas, en tanto pasó de 1.5 millones de casos acumulados en la década del 80, a 16.2 millones en la década del 2010-2019.
- En 2013, un año epidémico para la región, se registraron por primera vez más de dos millones de casos, y una incidencia de 430.8 cada 100 mil habitantes. Se registraron también 37 mil 692 casos de dengue grave y mil 280 muertes en el continente. En 2019 se registraron poco más de 3.1 millones de casos, 28 mil graves y mil 534 muertes.
- Los cuatro serotipos de dengue (DENV-1, DENV-2, DENV-3 y DEN-V 4) circulan a lo largo de las Américas, y en algunos casos circulan simultáneamente.
- La infección por un serotipo, seguida por otra infección con un serotipo diferente aumenta el riesgo de una persona de padecer dengue grave y hasta morir.
- En las Américas, el Aedes aegypti es el mosquito vector para el dengue, y está ampliamente distribuido en todo el territorio. Solo Canadá y Chile continental están libres de dengue y del vector. Uruguay no tiene casos de dengue, pero tiene el mosquito Aedes aegypti.
Sobre el dengue...
- Se transmite por la picadura de un mosquito infectado con uno de los cuatro serotipos del virus del dengue.
- Es una enfermedad febril que afecta a lactantes, niños y adultos. La infección puede ser asintomática, o cursar con síntomas que van desde una fiebre moderada a una fiebre alta incapacitante, con dolor de cabeza intenso, dolor detrás de los ojos, dolor muscular y en las articulaciones, y sarpullidos. La enfermedad puede evolucionar a un dengue grave, caracterizado por choque, dificultad para respirar, sangrado grave y/o complicaciones graves de los órganos.
- No hay medicina específica para tratar el dengue.
- La enfermedad tiene un patrón acorde con las estaciones: la mayoría de los casos en el hemisferio sur ocurren en la primera parte del año, y la mayoría de los casos en el hemisferio norte ocurren en la segunda mitad.
- La prevención y el control del dengue debe ser intersectorial e involucrar a la familia y la comunidad.
Sobre el Aedes aegypti...
El Aedes aegypti es el vector que presenta el mayor riesgo de transmisión de arbovirus en las Américas y está presente en casi todos los países del hemisferio. Es un mosquito doméstico (que vive en y cerca de las casas) que se reproduce en cualquier recipiente artificial o natural que contenga agua.
El mosquito puede completar su ciclo de vida, desde el huevo hasta el adulto, en 7-10 días; los mosquitos adultos generalmente viven de 4 a 6 semanas. La hembra Aedes aegypti es responsable de la transmisión de enfermedades porque necesita sangre humana para el desarrollo de sus óvulos y para su metabolismo. El macho no se alimenta de sangre.
El mosquito es más activo temprano en la mañana y al anochecer, por lo que estos son los períodos de mayor riesgo de picaduras. Sin embargo, las hembras, que necesitan continuar alimentándose, buscarán una fuente de sangre en otros momentos. La hembra Aedes aegypti se alimenta cada 3-4 días; sin embargo, si no pueden extraer suficiente sangre, continúan alimentándose cada momento que pueden.
El Aedes aegypti prefiere poner sus huevos en recipientes artificiales que contengan agua (tambores, barriles y llantas, principalmente) dentro y alrededor de las casas, escuelas y lugares de trabajo. Los huevos de Aedes aegypti pueden resistir las condiciones ambientales secas durante más de un año: de hecho, esta es una de las estrategias más importantes que la especie emplea para sobrevivir y propagarse.
Para eliminar los mosquitos, se recomiendan las siguientes acciones: evitar la recolección de agua en recipientes al aire libre (macetas, botellas u otros recipientes que puedan recolectar agua) para que no se conviertan en lugares de reproducción de mosquitos; cubrir adecuadamente los tanques y depósitos de agua para mantener alejados a los mosquitos; evitar acumular basura, tirar la basura en bolsas de plástico cerradas.
(Redacción digital. Con información de Elizabeth Martínez Izquierdo y la OPS)