Después de una sequía de 11 años sin alcanzar el triunfo en un duelo de postemporada, los Leones de Industriales se alzaron con la victoria este lunes ante los Gallos de Sancti Spíritus, con pizarra de 5-4 en el séptimo partido de cuartos de final, y aseguraron un puesto entre los cuatro grandes de la edición 62 de la Serie Nacional de Béisbol.
Un lanzamiento descontrolado del lanzador Yanielquis Duardo le abrió las puertas del plato a la carrera que marcó la diferencia definitiva, en un desafío de altas tensiones que, a pesar de los errores, fue digno de un playoff.
Igualadas llegaron ambas escuadras al noveno capítulo en medio del frenesí de un estadio José A. Huelga abarrotado, cuando Jorge Enrique Alomá disparó un tubey clave, llegó a la antesala después de un boleto intencional y una jugada de doble matanza, y anotó la del triunfo por el envío "salvaje".
Un Rafael Orlando Perdomo con una vergüenza inmensa y un corazón épico, aguantó como un León encima de la lomita en su primera apertura en Series Nacionales, mientras cargaba sobre su espalda toda la presión del mundo.
El Talismán Azul, Novato del Año de esta campaña, caminó con su flema característica y su alma vieja hasta el sexto capítulo, mientras sus rivales le conectaban 11 imparables y le anotaban cuatro carreras, incluidas dos sucias.
Cuatro errores, tres de estos del máscara Oscar Valdés, le estropearon el trabajo al joven de 19 años, que tuvo que irse sin decisión en el partido.
Su tropa logró sacar temprano del box al abridor Alex Guerra y a su sustituto Fernando Betanzo, pero fue silenciada por el taponero Duardo, traído por el mentor Lázaro Martínez desde el quinto acto, hasta que igualaron el choque a la altura del octavo, gracias a un hit impulsador del emergente Walter Abreu.
Frank Herrera, quien retiró a los cuatro contrarios que enfrentó, tres de ellos por ponche, y Juan Xavier Peñalver, con un gran relevo al sacar seis outs, tres por la vía incómoda, anularon a los anfitriones hasta que llegó el desenlace final.
En la ofensiva de 13 cohetes, se destacaron Yasiel Santoya, con un trío de ellos, Valdés y Juan Carlos Torriente, cada uno con dos y una impulsada, y Alberto Calderón con uno remolcador.
Desde el año 2012, cuando vencieron a Matanzas en semifinales bajo las riendas de Lázaro Vargas, los Azules no habían podido ganar un playoff, para desgracia de sus fieles seguidores a lo largo de todo el país.
Dos veces Granma y Ciego de Ávila, y en una ocasión Pinar del Rio, Las Tunas y Camagüey, se vistieron de verdugos durante esta última década para doblegar a los capitalinos, hasta que, luego de dos intentos fallidos, Guillermo Carmona los ha llevado a pagar su deuda con la historia.
Las Avispas de Santiago de Cuba serán los rivales de los Leones capitalinos en semifinales, todo un clásico del beisbol cubano. En el otro duelo, buscarán el boleto finalista los Leñadores de Las Tunas y los Cocodrilos de Matanzas, estos últimos actuales subcampeones nacionales. (Redacción digital. Con información de Tribuna de La Habana)