El Centro de Investigaciones Marinas de la Universidad de La Habana lidera una expedición con propósitos conservacionistas, que circunnavegará cinco mil 700 kilómetros de las costas norte y sur de Cuba, incluidos sus cuatro subarchipiélagos.
Este bojeo científico se puede considerar un
proyecto de Estado por la cantidad de ministerios, universidades e instituciones
que contribuyen a su realización, entre estos la Agencia de Medio Ambiente,
perteneciente al Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente.
Dieciocho científicos y comunicadores cubanos a
bordo del MV “Oceans for Youth” intentarán encontrar respuestas a por qué
algunos de los arrecifes de
coral en Cuba son más resilientes que otros y cuál es el estado de
las poblaciones de tiburones
en la mayor de las Antillas, señala una publicación de Cubadebate.
Por vez primera, en los arrecifes de coral alrededor de Cuba se evaluará con una misma metodología internacional, científicamente validada, y en la misma escala temporal:
- El estado actual de este ecosistema y las poblaciones de grandes depredadores (tiburones) y los tensores humanos que los afectan.
- El lazo microbiano.
- La presencia de microplásticos y el sistema de carbonados en la columna de agua.
- Obtener información sobre la megafauna (cetáceos, manatíes, tortugas, aves, peces) durante los recorridos.
Además, se colectará y
tomarán datos para múltiples proyectos de investigación de numerosas
instituciones cubanas a lo largo de todo el país, lo cual tributará a la
realización de varias tesis de doctorado y maestrías.
Arrecifes de coral en Cuba, únicos y decisivos para nuestro futuro
Los ecosistemas de arrecifes de coral de Cuba se consideran los más resilientes del Caribe. Un reciente estudio de la Universidad de Queensland identificó 50 arrecifes de coral que, en su conjunto, tienen el potencial de sobrevivir a los impactos del cambio climático y la capacidad de ayudar a repoblar arrecifes vecinos con el tiempo, cuatro de estos arrecifes se encuentran en aguas cubanas.
Por la posición geográfica del archipiélago cubano y
otras características, las posibilidades de beneficiar territorios vecinos son
enormes y alentadoras, incluidos arrecifes degradados en nuestra propia
plataforma.
Quinientos millones de personas a nivel mundial
dependen directamente de arrecifes de coral sanos. Estas “selvas marinas”
albergan más del 30 por ciento de toda la vida marina, proveen protección ante
los efectos del cambio climático y generan millones de empleos. A pesar de su
importancia, estos ecosistemas son uno de los más degradados en todo el mundo y
en Cuba también enfrentan numerosos desafíos para su conservación.
Para el archipiélago cubano, los arrecifes coralinos
tienen mucha importancia por su función protectora de las costas, el aporte de
arena a las playas, las especies que viven una parte de su ciclo de vida en él,
entre las que se encuentran algunas de mucha importancia económica (langostas y
peces), y su valor para el turismo. Un buen manejo de este ecosistema puede
generar ingresos considerables a la economía cubana.
Cuba ante el cambio climático
Los arrecifes de coral están priorizados en el Plan de Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático, conocido como Tarea Vida, pero las investigaciones son muy difíciles de realizar por la compleja logística que requieren y en los últimos años también se vieron afectadas por la COVID-19. Es por ello que existen vacíos de información sobre el estado actual de los arrecifes cubanos, la salud de las poblaciones de tiburones y sobre la influencia que la actividad humana ejerce sobre ellos.
“Esta expedición es el fruto de décadas de intenso trabajo. Por primera vez contaremos con una fotografía completa en todo el archipiélago del estado de salud de los corales, tiburones, peces, erizos, calidad del agua, microbiología y muchos otros parámetros ambientales”, aseguraron los doctores Fabián Pina Amargós y Patricia González Díaz, líderes científicos de la expedición.
“Buscaremos evidencias de cómo los impactos del cambio climático están afectando a los ecosistemas y a las comunidades costeras, y la efectividad de nuestro sistema de áreas marinas protegidas que cubre el 25 por ciento de toda la plataforma marina de Cuba.”
En el bojeo interviene también la compañía Avalon-Marlin,
con operaciones turísticas en diferentes lugares de Cuba, especialmente en
Jardines de la Reina, sitio emblemático para la conservación y estudio de los
arrecifes y los tiburones y ejemplo de cómo se puede establecer una alianza
entre el turismo, la ciencia y la conservación de los valores naturales con
mayores ingresos para la economía del país.
Igualmente, participan organizaciones internacionales
vinculadas al medioambiente que contribuyen con las investigaciones y la
ejecución de diversos proyectos en Cuba en los últimos 20 años, especialmente
de Enviromental Defense Found (EDF), organización que contribuyó en
equipamiento y otros aportes; Wildlife Conservation Society, que se implicó
directamente en lo relacionado con el equipamiento para los muestreos de
tiburones; el Harte Research Institution, quien asumió parte del equipamiento
que se utilizará, además de cursos de superación, tanto de los componentes
científicos como de las certificaciones de buceo a través de la didáctica SSI,
la segunda más prestigiosa del mundo, y Sweet spa que aportó el combustible y
otros aspectos logísticos de la expedición.
A todos los anima un noble propósito y una fuerte conciencia: “El mar nos une. La conservación de arrecifes de coral y recursos marinos en Cuba benefician ecosistemas y comunidades en Estados Unidos y en toda la región. Nos honra contribuir con esta expedición”, dijo Valerie Miller, directora del programa de EDF con colaboraciones con Cuba.
Distingue al bojeo el propósito de generar una gran
comunicación en tiempo real que convierta a esta investigación en un suceso
público, de modo que contribuya a la educación ambiental de la población
cubana, al orgullo de vivir en un país con las condiciones naturales de Cuba,
con ecosistemas conservados.
Este objetivo es asumido por la productora Naturaleza secreta, con amplia experiencia en la comunicación ambiental, y
en su ejecución se concibe la colocación de vallas en lugares públicos, la
realización de una serie documental, exposiciones fotográficas, libros y la
transmisión en vivo desde el barco y por un equipo de tierra a través de las
redes sociales digitales, mediante una cadena de páginas oficiales de medios
públicos, instituciones, universidades, fundaciones y organizaciones diversas.
Con el espíritu que animó al espeleólogo y geógrafo Antonio Núñez Jiménez, quien realizó dos bojeos a Cuba, en el año de su centenario, y a otros científicos y naturalistas cubanos que los precedieron, los científicos cubanos que participan en esta singular travesía, son conscientes de la importancia de este bojeo científico dedicado a los arrecifes coralinos y los tiburones. (Redacción digital)