Se le considera “capital de la
capital”, pues acoge la mayor cantidad de organismos de la administración
central del Estado, la más importante red hospitalaria de Cuba, centros de
cultura y recreación, hoteles, galerías y museos.
El municipio, conformado por ocho consejos populares, apostó en 2023
por continuar fortaleciendo su gran potencial recreativo y la infraestructura
para el desarrollo del turismo nacional y extranjero, a lo que tributa también
su gran diversidad de hostales, restaurantes y cafeterías.
Durante 2023, continuó impulsando el desarrollo de alianzas entre las
universidades y centros de investigación del municipio, dirigidas a potenciar
proyectos de desarrollo local y de carácter comunitario.
En este período, avanzó en las
acciones en los barrios en transformación, como La Timba y El Fanguito, donde
se potencian iniciativas sociales, económicas, culturales y deportivas para
elevar la calidad de vida de sus pobladores.
Entre las prioridades de este año, a partir de los planteamientos e
inquietudes de la población, estuvieron las medidas para enfrentar la situación
de la recogida de desechos sólidos en el municipio.
También se trabajó intensamente en la estrategia de atención a la
higiene de esta céntrica área habanera, con el incremento del aprovechamiento
de los equipos con que cuenta el territorio, de manera que permita la elevación
de la eficiencia y del impacto.
Otro tema complejo ha sido el transporte urbano, en el cual el municipio
se ha visto afectado, como el resto de la capital, a partir de la difícil
situación nacional con el combustible, lo que repercutió en la movilidad de la
población, en medio de la habitual gran afluencia de visitantes de otras
provincias.
Igualmente, se dio prioridad en 2023 a la expansión en esta zona
comercial de las formas de gestión no estatal, para fomentar acciones en
función de la articulación y contribución a la estrategia de desarrollo local.
Debido al déficit de personal en entidades estatales, disminuyen los
ingresos al presupuesto municipal por concepto de impuestos sobre fuerza de
trabajo, por lo que se trazan acciones para revertir la situación a corto
plazo.
En el año, se realizaron en Plaza de la Revolución ferias de empleo y
cursos de habilitación a personas desvinculadas del estudio o el trabajo, sobre
todo las que residen en barrios en transformación.
Se trabajó por eliminar violaciones
detectadas con administradores de mercados estatales y arrendados y en el
cumplimiento de los precios concertados por acuerdo del Consejo de
Administración Municipal.
También se laboró en el control de la distribución del módulo de
productos controlados y del proceso de venta a la población.
Igualmente, se laboró en la solución de planteamientos relacionados con
el servicio de abasto de agua y la situación de saneamiento, de salideros
detectados y desobstrucción del alcantarillado, con brigadas de la Empresa Aguas
de La Habana.
Este ha sido uno de los municipios capitalinos donde se comenzó a
extender el empleo del comercio electrónico, estrategia del país para dinamizar
la economía, lo que se ha ido implementando y avanzando en el transcurso del
año.
Intenso ha sido el trabajo para enfrentar las indisciplinas sociales e
ilegalidades, con la imposición de multas a violadores de lo estipulado, y el
enfrentamiento a hechos de robos y violencia que afectan la tranquilidad
ciudadana.
En este período, se consolidó la realización de ferias en varias
comunidades, con productos agropecuarios, ventas de garaje, ofertas del
comercio, entre otros servicios.
Además, se trabajó con los nuevos
actores económicos de las formas de gestión no estatal, con el objetivo de
tributar de conjunto con entidades estatales al desarrollo territorial.
Se alistaron y se brindó mantenimiento a las principales salas de cine
del municipio para acoger la edición 44 del Festival de Nuevo Cine Latinoamericano,
cita que esta vez se llevó hasta arterias y áreas públicas, con la disposición
de varias pantallas gigantes para la visualización de filmes y documentales en
retrospectiva.
El municipio avanza en la implementación de acciones de la Ley 148, de Soberanía Alimentaria y
Seguridad Alimentaria y Nutricional, con la disposición de una decena de organopónicos
para la siembra de hortalizas y cultivos de gran demanda, aprovechando las
áreas verdes.
Este ha sido un año complejo para el municipio, como para el resto del país,
ante la situación económica recrudecida por el bloqueo de Estados Unidos contra
Cuba.
En medio de un contexto social en el que aumentó el éxodo de pobladores
de este municipio hacia el exterior, en especial de profesionales y otras personas
en edad laboral.
Esta problemática se ha complejizado con la disminución de personal en
empleos estatales, que se ha movido hacia el sector no estatal, en busca de
mejorar sus ingresos económicos.
En este sentido, el territorio buscó alternativas, como las ofertas de
empleo a jóvenes que no se presentaron a las pruebas de ingreso a la
universidad y no optaron por carreras.
El aumento vertiginoso de los
precios de artículos de primera necesidad, sobre todo alimentos, unido a la
demora en la entrega de algunos productos de la canasta básica familiar normada,
ha incidido en que la situación sea más compleja.
No obstante, el municipio mantiene una perenne inspección para detectar
y penalizar las violaciones de precios; al tiempo que acelera la repartición de
los productos normados, una vez que llegan a los almacenes.
Las autoridades de Plaza de la Revolución laboran con organismos, organizaciones, instituciones y empresarios para buscar soluciones a las principales problemáticas, dar respuesta a las inquietudes y demandas de la población y buscar estrategias que tributen al desarrollo de este territorio capitalino. (Milena Céspedes Milán)