1789. Nace en La Habana María Mercedes Santa Cruz y Montalvo.
Conocida como la Condesa de Merlín, se educó en el convento de Santa Clara y, luego, en colegios de Europa.
En su condición de cantante soprano, se presentó en los salones de ese continente, donde se daban cita escritores, músicos y artistas famosos.
De regreso a La
Habana, participó en una actividad que se realizó en el teatro Tacón,
organizado por el Marqués Esteva de las Delicias. Fue un baile que tenía el
objetivo de recaudar fondos para las mujeres dementes de Maternidad y
Beneficencia.
Escribió diversos libros, entre los que se
encuentran Sor Inés y Mis 12 primeros años. También creó una obra titulada
Viaje a La Habana, donde refleja su amor por la tierra donde nació.
1895.
Juan Gualberto Gómez recibió en La Habana la orden de alzamiento que José Martí
y otros compatriotas suscribieron en Estados Unidos.
En un trabajo titulado Juan Gualberto Gómez en la Sociedad de amigos del País, Martí definió las cualidades y patriotismo de ese luchador independentista, cuando manifestó:
"Él sabe amar y perdonar, en una
sociedad donde es muy necesario el perdón. Él quiere a Cuba con aquel amor de
vida y muerte, y aquella chispa heroica, con que la ha de amar en estos días de
prueba quien la ame de veras."
1993.
Se clausura en La Habana el Congreso Pedagogía.
En su intervención, el Comandante en Jefe Fidel Castro señaló:
“El problema de una sociedad, tal como
lo vemos nosotros, dentro de nuestro concepto revolucionario, nuestro concepto
socialista, es que el hombre tiene derecho a organizarse de una manera
racional, porque si hasta las hormigas son capaces de organizarse de manera
racional, si hasta las abejas son capaces de organizarse de una manera
racional, ¿por qué el hombre, la más extraordinaria creación de la naturaleza,
el único ser provisto de una verdadera inteligencia, no será capaz de
organizarse de una manera racional.”
2005. Se inaugura en La Habana el Centro Cultural Dulce María Loynaz.
La institución, ubicada en 19 y E, en El Vedado habanero, facilita espacios de participación para la realización de proyectos culturales y para la reflexión sobre la creación literaria.
También se desarrolla una programación cultural
sistemática, variada y balanceada; aprovecha los espacios disponibles, propiciando la participación de los creadores y de diferentes grupos sociales. (José
Pérez-Galdós Ortiz. Foto: Casa del Alba Cultural)
FNY