Cuba perfeccionará su sistema de ciencia, tecnología e innovación, enfocado en la solución de problemas concretos, explicaron en La Habana funcionarios del sector.
A partir de su presentación en el Consejo Nacional de Innovación y su aprobación en la reunión
del Consejo
de Ministros, los doctores Eduardo Martínez Díaz, y Armando Rodríguez Batista, titular y vicetitular, respectivamente, del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, ampliaron que se priorizarán sectores como la Nanotecnología e Inteligencia
Artificial.
Los funcionarios detallaron que el país tiene una cartera de
más de seis mil 500 proyectos, y las prioridades de la ciencia e innovación
deben centrarse en incrementar ingresos en divisas a partir de las exportaciones
de bienes y servicios, además de aumentar la producción de energía, con énfasis
en las fuentes renovables y en el incremento de la producción de alimentos.
Especificaron que, entre las tareas para ese perfeccionamiento, se incluye incrementar la inversión en ciencia e innovación.
“El sistema empresarial necesita invertir más en ciencia e
innovación para desarrollarse; también, los Gobiernos locales. Por otra parte,
tenemos que aprovechar más la cooperación internacional y la negociación de los
activos intangibles que se van creando en el propio desarrollo de los
proyectos”, argumentaron.
Resulta necesario identificar todos los resultados científicos y tecnológicos en el país que no se han aplicado y trazar una hoja de ruta para su introducción, subrayaron.
A ello se añade el impulso de la Nanotecnología, la Nueva
Biología y la Inteligencia
Artificial, consideradas imprescindibles para el desarrollo científico de un
país.
“Permanentemente, surgen tecnologías emergentes y nuevos
conocimientos que cambian paradigmas. Hemos identificado estas tres áreas
claves, entre otras, para el presente y el futuro desarrollo de la ciencia
cubana y tenemos el firme propósito de realizar las acciones necesarias para
impulsarlas desde el punto de vista de formación de capital humano y en
creación de infraestructura”, aseveraron los expertos.
Otros de los objetivos, apuntaron, serán medir con objetividad
los resultados de la ciencia e innovación e implementar indicadores de impacto.
“Queremos determinar el aporte del conocimiento a la
economía, perfeccionar el cálculo del por ciento del producto interno bruto que se dedica a la ciencia y la innovación, y
estamos cerca de concluir el proyecto para calcular el Índice Global de Innovación, teniendo en cuenta las características
propias de nuestro país y la necesidad de visualizar la capacidad innovadora de
Cuba”, puntualizaron.
Cuba cuenta actualmente con 50 universidades y 250 entidades
de ciencia, tecnología e innovación. (Redacción digital, con información y foto de Prensa Latina)
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