La cultura estimula y refuerza
el sentimiento de patria, es el alimento fundamental e indispensable para
la espiritualidad del pueblo y provee de libertad, afirmó este sábado el presidente
cubano Miguel Díaz-Canel.
Al intervenir en el X Congreso de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), el también primer secretario del Comité Central del
Partido Comunista de Cuba explicó la inexistencia de maneras para imponer la
creación, pues el arte y la cultura son expresión de ideas propias, de lo verdadero; lo que perdura tiene como valor
distintivo la originalidad.
La nación enfrenta una guerra en dos dimensiones, la
económica, diseñada para elevar las carencias a niveles extremos y quebrar la
voluntad de todo el pueblo; y en paralelo, la cultural, con un componente
simbólico y psicológico de intoxicación
mediática, armada en grandes laboratorios para apuntar directamente contra
la unidad popular, esclareció Díaz-Canel en la última jornada de la cita de artistas
e intelectuales.
Frente a esas amenazas, la cultura mantiene un papel
determinante como generadora de ideas y valores y como escudo y espada de la nación, dijo.
Comentó que, en estos días de enfrentamiento a los destrozos
provocados por el huracán Oscar en
el extremo oriental de Cuba y su impacto en las comunidades rotas por los
golpes de la naturaleza, la cultura es imprescindible en la restauración
espiritual de sus habitantes.
Díaz-Canel refirió que en
Cuba existe una sola política cultural tanto para el sector estatal como
para el no estatal, y en ambos tiene que promoverse, defenderse y dar espacio a
quienes hacen el arte verdadero, que es una ventana al mundo de lo más
auténtico y no un adorno para entretener.
Señaló que ejercer y fomentar el pensamiento crítico es
crucial para entender el momento que vive el mundo y los valores de la causa
que defiende Cuba, porque solo la cultura, junto con la educación, tiene la
capacidad y la posibilidad de ser el único antídoto contra la manipulación y la
idiotización de las audiencias acríticas.
El congreso envió al General de Ejército Raúl Castro, líder de la Revolución cubana, una
escultura en pequeño formato del artista José Villa Soberón, en reconocimiento
a sus aportes y defensa de la identidad nacional.
El máximo foro de los escritores y artistas eligió a Marta
Bonet como su presidenta. Junto a ella, dirigirán la organización en los
próximos cinco años Magda Resik, como vice presidenta primera, y nombraron nuevos
miembros de honor de la Uneac: Alfredo Sosabravo, Abel Prieto, Eduardo Torres
Cuevas, Aurora Bosch, Frank Fernández y Carmen Solar.
Alpidio Alonso, ministro de Cultura, clausuró el evento, felicitó a la nueva dirección y convidó a enfrentar juntos los desafíos que imponen los tiempos para la creación artístico-literaria. (Redacción Digital. Foto: Facebook)
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RSL