1875. Inauguran en La Habana el hotel Inglaterra.
Localizado en el Paseo del Prado, constituye el más antiguo de los hoteles en funcionamiento en La Habana.
Se destaca por el fuerte acento mudéjar de sus decorados interiores, en armonía con la magnificencia de su fachada.
El edificio es de estilo neoclásico, con elementos que le dan un toque de originalidad, como los mosaicos alicantinos y verjas traídas especialmente de Sevilla, España.
En 1981, el hotel fue declarado Monumento Nacional.
1986. Fallece en La Habana René Márquez.
En su juventud, aprendió el oficio de mecánico dental y, a la vez, a tocar guitarra de forma autodidacta. Sus inicios en el arte acontecieron en el poblado de Remedios, donde ofreció serenatas y compuso las primeras obras.
En 1937, llega a La Habana y trabaja con diversas agrupaciones musicales, como las orquestas Neno González, Siglo XX y Arcaño y sus maravillas.
Su consagración definitiva tuvo lugar en la orquesta Julio Cueva, donde permaneció durante 10 años, se presentó en diferentes lugares de Cuba y realizó diversas grabaciones.
Años después, emprendió el camino como cantante solista hasta que en 1970 ingresa en el grupo Tanda de Guaracheros, del Consejo Nacional de Cultura, que posteriormente dirigió.
Su obra autoral comprende canciones, como Espontáneamente, Ven junto a mí, En el cielo de mi vida, Es la ilusión, La vida es un momento y Puede una flor, todas realizadas en tiempo de boleros.
1921. Nace en La Habana Ángel Díaz Arroyo.
Fue hijo de Tirso Díaz, destacado compositor y guitarrista de la trova tradicional cubana.
Desde pequeño, estuvo en contacto con el ambiente musical que existía en su casa, situada en el Callejón de Hammel, en Centro Habana.
En ese sitio, se presentaban trovadores, acompañados de su guitarra, instrumento que Díaz Arroyo estudió de forma autodidacta. Realizó presentaciones en la emisora Mil Diez, además de en cines y teatros.
Tuvo larga e intensa participación en diferentes peñas del bolero en centros culturales y hoteles habaneros, como el conocido Pico Blanco, del hotel Saint John, en El Vedado. (José Pérez-Galdós Ortiz. Foto: Blog Viajes de Cuba)
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