Este 19 de septiembre tenemos a la vista al huracán Fiona, que va dejando lluvias, vientos fuertes e inundaciones por varios territorios del Caribe. Mientras, las soluciones de los modelos matemáticos apuntan a que en las próximas horas pudiera alcanzar gran intensidad, siempre lejos de Cuba, apunta el profesor e investigador Luis Enrique Ramos Guadalupe, historiador de la Meteorología en la mayor isla de las Antillas.
Justo en esta fecha, hace 185 años, nació en Poboleda, Catalunya, Benet Carles Josep Vinyes i Marturell, que para cubanos y peninsulares, con su sempiterna inclinación a lo coloquial, resultó ser simplemente “el padre Viñes”. Vivió en Cuba desde 1870, y aquí desarrolló una brillante carrera como ciclonólogo, hasta su muerte en 1893, recuerda Ramos Guadalupe.
A Viñes -precisa el historiador- se deben dos acontecimientos que han dado gloria a Cuba y a España: la elaboración del primer pronóstico y la emisión del primer aviso público de ciclón tropical en la historia de la Meteorología, un ejercicio predictivo sin precedentes realizado el 11 septiembre de 1875, y publicado pocas horas después por la prensa habanera.
Además, introdujo en Cuba el primer equipo de registro continuo de variables meteorológicas, y el primer telescopio con prestaciones profesionales. Sus aportes teóricos, en particular las “Leyes” de la rotación y traslación ciclónicas, y su aplicación, están contenidas en dos libros y 12 artículos científicos. Fue electo de Socio de Mérito de la Real Academia de Ciencias de La Habana (1873), y reconocido por otras instituciones de Cuba y del exterior, explica el tamién miembro fundador de la Sociedad Meteorológica del país caribeño (SometCuba).
Hoy, el Premio Benito Viñes es el máximo que SometCuba concede en materia de investigación: con una entrega para profesionales y otra para estudiantes de excelencia en la carrera de Meteorología. En 2003, SometCuba vindicó el nombre de Viñes al otorgarle, post mortem, el Premio Nacional de Meteorología, remarca Ramos Guadalupe.
A 185 años de su natalicio -apunta-, la Oficina del Historiador perpetúa la memoria del Sabio jesuita en las salas del Museo Observatorio del Convento de Belén, exactamente el mismo sitio donde 147 años atrás Benito Viñes realizó su extraordinario pronóstico, el primero en la historia, sobre la trayectoria de un ciclón tropical. (Redacción digital. Con información de Habana Radio)