Un concierto-homenaje a Eusebio Leal puso de nuevo a latir el corazón del teatro Martí, en La Habana Vieja, al celebrarse este domingo el aniversario 80 del natalicio del “eterno historiador”, fecha escogida para la reapertura del coliseo.
La Camerata Romeu, los maestros
Frank Fernández y José María Vitier en el piano, la flautista Niurka González y
el trío Los embajadores, entre otros reconocidos exponentes de la cultura
cubana, dejaron su mejor arte en el escenario durante el tributo que acercó a
la identidad de Leal desde la sonoridad.
Con la Camerata Romeu, dio inicio la velada cultural dedicada a Eusebio Leal. |
Una gran ovación con el público
de pie arropó a Luis Carlos Guzmán, jefe del Cuerpo de Bomberos de Cuba, a
quien Perla Rosales, directora adjunta de la Oficina del Historiador de la
Ciudad, concedió la medalla
conmemorativa Aniversario 80 del Natalicio de Leal, en honor a quienes
protagonizaron actos heroicos, tras la gran explosión por escape de gas en el hotel
Saratoga.
Como no podía ser de otra manera,
pues cantarle a la capital es cantarle a Leal, temas como Rezo a la ceiba, por Leo
Vera; Danzón a La Habana, con Alejandro Falcón en el piano y Janio
Abreu en el clarinete, y la icónica Sábanas Blancas, de Gerardo Alfonso,
rindieron tributo a la Ciudad Maravilla que el historiador contribuyó a
salvaguardar del paso del tiempo.
Ahora vienen muchos recuerdos, en
este escenario entregué a Eusebio, de mi puño y tras su pedido, la letra de Cabalgando
con Fidel, dijo un emocionado Raúl Torres, antes de interpretar Ven
pa' La Habana, de su autoría.
Caminante, novio eterno, es La Habana tu ciudad entonó Vania Borges
en El
novio de La Habana, sencillo que da título al recién estrenado disco
que rinde tributo a Eusebio, coproducción de Bis Music y el sello discográfico
La Ceiba.
El poema musicalizado Siembra,
por Alden Knight, y Profeta del amor, interpretado por el Dúo Ktalejo, ambos del
mencionado fonograma, también conformaron la velada musical en el llamado Coliseo de las 100 puertas.
Al salir a escena, el trovador Eduardo Sosa agradeció la invitación a participar en el homenaje al querido intelectual y recordó el amor que este sentía por La Bayamesa, una de las piezas más emblemáticas del patrimonio sonoro e histórico de la nación.
El teatro Martí, espacio majestuoso que tanto le debe a Leal en su
conservación, volvió a acoger público, luego de cuatro meses de intensos
trabajos de restauración, principalmente en la carpintería, cubiertas y falsos
techos, luego de los sucesos acaecidos en el hotel Saratoga.
Asistieron a la velada Rogelio
Polanco, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de
Cuba (PCC) y jefe del Departamento Ideológico; Luis Antonio Torres, primer secretario
del Comité Provincial del PCC en La Habana, además de otros dirigentes y
personalidades, en especial de la cultura.
Fueron dos horas de espectáculo, en el cual los artistas, bajo la dirección de Rolando Almirante, presentaron sus respetos al eterno novio de La Habana, aquel que en vida solo aspiró "a ser útil”. (Redacción digital. Con información y fotos de ACN y Twitter)