Hace 55 años, hermanos de una columna de retaguardia del Ejército insurgente comandado por Ernesto “Che” Guevara fueron aniquilados, tras una delación, mientras luchaban por la independencia en Bolivia.
Murieron en disposición de
combate, tratando de hacer frente a la emboscada.
El momento fue recordado en la plaza Agramonte, de la histórica Universidad de La Habana, con la presencia de Roilán Rodríguez, miembro del Comité Provincial del Partido Comunista de Cuba en La Habana; Tatiana Viera, coordinadora de Programas del gobierno provincial, y otros dirigentes políticos y gubernamentales del municipio de Plaza de la Revolución, además de miembros de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana y de la Federación Estudiantil Universitaria.
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| Foto: tomada de la cuenta en Twitter de Roilán Rodríguez. |
En el acto conmemorativo, se recordó que en aquellos hechos perdieron la vida el comandante cubano Juan Vitalio Acuña, Israel Rojas Zayas, Gustavo Machín y la única mujer de la guerrilla, la argentino-alemana Haydée Tamara Bunke Bíder, cuyo cuerpo fue arrastrado hasta las profundidades del río cercano.
Otros combatientes muertos en el combate fueron el peruano José Restituto Cabrera, los bolivianos José Aquino y Walter Arrencibia, Moisés Guevara y Freddy Maymura.
Sus nombres, su heroísmo y valentía fueron nuevamente citados desde la Universidad de Félix Varela, Ignacio Agramonte, José Antonio Echeverría, de Fidel Castro y de Raúl Castro, entre otros muchos patriotas cubanos.
En las palabras de clausura del acto, Roilán Rodríguez recalcó el eterno agradecimiento al legado de estos inolvidables combatientes.
Parafraseando a Fidel, el dirigente partidista expresó:
“Si queremos aspirar como queremos que sean nuestros hijos, jóvenes, combatientes, diremos que sean como el Che, como Tania y como los hombres que recordamos hoy.” (Iliana Ortega Chávez)