25 de octubre.
1897. Fallece en combate en la zona del Calvario, en La Habana, Adolfo
del Castillo.
Como combatiente por la
independencia de Cuba, por su valor y constancia, fue temido por las fuerzas
españolas.
En las contiendas, alcanzó el
grado de Comandante y, después, el de Brigadier.
Estuvo presente en la ocupación
de diferentes poblados en la provincia de La Habana.
En la actualidad, en la zona de
Guanabacoa, lugar donde pasó varios años de su vida, existe en un pequeño
parque un monumento dedicado a su persona. También se encuentra un obelisco en
el sitio donde se produjo su caída.
1918. Nace en La Habana Alfredo Diez-Nieto.
En su quehacer profesional, se
desempeñó como director de orquesta, profesor y compositor.
En 1965, organizó y dirigió la
Orquesta Sinfónica Popular de Conciertos, formada por instrumentistas de grupos
bailables. Como compositor, también ganó muchos elogios, tanto del público como
de la crítica especializada. Su obra se divulgó por diferentes países.
En 2004, recibió el Premio
Nacional de la Música.
1961. El Comandante Ernesto Che Guevara habla sobre el plan económico
de 1962, en el Ministerio de Industrias, en La Habana.
Desde el propio año inicial de la
Revolución, el Che había estado vinculado con el quehacer económico del país.
Primero fue jefe del Departamento
de Industrialización del Instituto Nacional de Reforma Agraria, después presidente
del Banco Nacional de Cuba y, desde febrero de 1961, atendía las funciones de ministro
de Industrias.
1964. El Comandante en Jefe Fidel Castro pronuncia un discurso en la
clausura del Primer Congreso de Constructores. La actividad tuvo lugar en el
Salón de Embajadores del Hotel Habana Libre.
Expresa:
“Es decir, que dondequiera que se
proyecta el desarrollo económico del país, en todos los sentidos, salta en
primer lugar la necesidad del desarrollo del ramo de las construcciones. Prácticamente
todas las tareas de la economía dependen de las construcciones, lo mismo se
trate de las tareas productivas que de las mal llamadas tareas improductivas.”
1966. Es inaugurada, en el Coliseo de la Ciudad Deportiva en La Habana,
la XVII Olimpiada Mundial de Ajedrez.
La competencia se desarrolló en
el Salón de Embajadores del Hotel Habana Libre y contó con la participación de
ajedrecistas de 52 países.
Al certamen asistieron los mejores jugadores del mundo en esa época y fue elogiado como uno de los mejor organizados. (José Pérez-Galdós)