La Jornada de la Cultura Japonesa en Cuba tuvo como su primera sede la Casa Museo de Asia, institución cultural de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, que honra y difunde la diversidad y memoria de la cultura asiática.
Este inmueble, ubicado en la calle Mercaderes, en pleno centro histórico
capitalino, exhibe en sus salas expositivas una amplia colección y
documentación, única de su tipo, que permite comprender las influencias
culturales entre el Oriente y Cuba desde finales del siglo XVIII y XIX.
Con una tradición milenaria en su
extensa ruta historiográfica, Japón nos presenta los ecos y tendencias
renovadoras que fusionan los saberes de la filosofía con el arte, el
patrimonio, la historia y la vida cotidiana.
En esta oportunidad, la Casa Museo de Asia fue testigo
revelador de una exposición de grabados tradicionales que forman parte de una
muestra significativa, llegada de los fondos del Instituto e Industria de
Cámara de Japón, gracias a la gentileza y sensibilidad del Sr. Hiroshi Yano
san, director de esta institución nipona.
El estilo de estos grabados
mediante la técnica de estampado en madera fue producido en la nación japonesa
a inicios del siglo XVIII, mostrando la belleza, imaginación y preocupación por
la representación de imágenes paisajísticas, pero también con referencia en las
artes, ya fuese a través del teatro, la música y la pintura, y de otras
expresiones de la realidad y la ciencia.
Con la presencia de una
importante representación de la embajada de Japón, fue inaugurada en la Casa de
Asia la exposición titulada Awazu Kiyoshi.
Kenji Hirata, embajador de Japón
en Cuba, significó:
“Esta actividad inicia oficialmente la celebración de la Jornada de la Cultura Japonesa en La Habana, que, gracias a instituciones, organismos y otros colaboradores, de conjunto con la embajada, posibilita difundir los valores de la identidad de una cultura que puede ser disfrutada durante este mes entre los cubanos y visitantes”.
Kenji Hirata, embajador de Japón en Cuba. |
“Se trata de una exposición de ‘Niski-e’, que es igual al grabado en madera de múltiples colores. Una definición de una técnica muy empleada también en la creación del género de grabados Ukiyo-e, y que en el caso particular de este estilo es significativo mencionar su florecimiento en Japón durante los siglos XVIII y XIX”, explicó el diplomático.
Asimismo, agradeció a la Casa de
Asia por el acompañamiento en las actividades de la embajada y en la promoción
de los valores más notables y tradicionales de la cultura e historia de Japón.
Los grabados expuestos no son originales,
pero si están recreados sobre fotografías impresas en el papel Washi, tradicional
de esta cultura, recreación instantánea posible gracias a las bondades
digitales de las cámaras y las propias impresiones.
El agregado cultural de la legación
diplomática, Yoshida Yasuo, dio lectura a las palabras del director del
Instituto e Industria de Cámara de Japón, quién también agradeció la
oportunidad de compartir con los cubanos el honor y el placer de un arte que
trasciende más allá de las fronteras nacionales, como parte de la expresión del
intercambio cultural entre las dos naciones.
Yoshida Yasuo, agregado cultural de la embajada de Japón en Cuba. |
En ello, destacó la pluralidad de imágenes que pueden ser apreciadas en la exposición, a partir de la recreación de temáticas diferentes, que se acercan a la presentación de equipos fotográficos, telescopios, prismáticos, y de otras tipologías, que son el resultado de un periodo histórico en Japón.
Yamir Macias, directora de la Casa de Asia, agradeció el gesto del intercambio y de que a la vez fuese esta institución el espacio ideal para compartir la cultura y la memoria de una nación capaz de abrirse al mundo occidental, mostrando las vanguardias más importantes de un arte renovador que rompía con las normas tradicionales, enseñando nuevos referentes devenidos del Impresionismo y la Abstracción.
También, destacó la presencia en los fondos de la Casa de Asia, de un Biombo
japonés, restaurado y conservado por la conjugación de los aprendizajes mutuos
entre ambas culturas.
Vale reconocer el mérito de grandes maestros del período Edo, como
fueron Hokusai e Hiroshige, quienes crearon imágenes hoy conocidas en todo el
mundo.
La jornada de la cultura japonesa se extiende hasta el 26 de noviembre e incluye un programa diverso de actividades, donde se integran talleres para el aprendizaje del Origami en la propia Casa de Asia, además del Furoshiki, Cosplay y la Historieta, entre otras exposiciones y conferencias en la sede de varias instituciones del centro histórico de La Habana Vieja. (Redacción digital. Con información de Habana Radio)