Un estudio demostró que las personas que se mantienen bien hidratadas desarrollan menos enfermedades crónicas y tienen más esperanza de vida, informó una fuente especializada.
De acuerdo con la revista eBioMedicine, los investigadores analizaron
los vínculos entre los niveles de sodio en sangre y la ingesta de líquidos.
Descubrieron que los adultos con
niveles de sodio en sangre por encima de un rango normal eran más propensos a
desarrollar enfermedades crónicas y mostrar signos de envejecimiento biológico
avanzado, incluso tenían más probabilidades de morir a una edad más temprana.
Cuando las personas están bien
hidratadas, parecen estar más sanas, desarrollan menos dolencias cardiacas y
pulmonares.
“Los resultados sugieren que una
hidratación adecuada puede ralentizar el envejecimiento y prolongar una vida
libre de enfermedades”, subrayan los investigadores.
La mayoría de las personas puede
aumentar su ingesta de líquidos de forma segura para alcanzar los niveles
recomendados, lo que puede hacerse con agua u otros líquidos, como zumos o
verduras y frutas con alto contenido en agua.
Los científicos recomiendan a las mujeres consumir de 1,5 a 2,2 litros
de líquidos al día, y los hombres, de dos a tres.
Alertaron que aproximadamente la mitad de las personas de todo el mundo no cumplen las recomendaciones de ingesta diaria total de agua, que suele comenzar en 1,5 litros. (Redacción digital. Con información de Prensa Latina)