Espacio de reafirmación
revolucionaria, de recordación y celebración devino el acto con motivo Día de
la Rebeldía Nacional, que acogió este viernes la Plaza Roja, de La Víbora, en el municipio habanero de Diez de Octubre.
La cita rememoró los sucesos
históricos acaecidos el 26 de julio de 1953: los asaltos a los cuarteles
Moncada, en Santiago de Cuba, y Carlos Manuel de Céspedes, de Bayamo, acción
que constituyó motor impulsor para la última etapa de la lucha libertaria
cubana.
En el acto, recibieron
reconocimientos las direcciones destacadas de Diez de Octubre y Proyectos de
Desarrollo Local con un desempeño meritorio. También fue distinguida la
dirección del territorio por el trabajo desarrollado en medio de difíciles
condiciones.
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| Reconocimiento a Diez de Octubre. Foto: Yermanis Matos Bless. |
Los destacados fueron: la dependencia Oficina Nacional Tributaria, la Unidad Básica de la Industria Alimentaria, las direcciones generales de Educación, Trabajo y Seguridad Social, la Empresa DMOTU, Justicia, el Ministerio de la Agricultura y los Proyectos de Desarrollo Local La Fela y Burbujas.
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| Foto: Yermanis Matos Bless. |
En el acto, un grupo de trabajadores
recibió el carné de militantes del Partido Comunista de Cuba (PCC).
La conmemoración contó con varios
momentos culturales a cargo de la Compañía JJ, la intérprete Anicia Martínez
Rodríguez y la actriz y declamadora Mirta Lidia Pérez.
Las palabras centrales estuvieron
a cargo de Aymara Guzmán Carrazana, primera secretaria del Comité Municipal del
PCC en Diez de Octubre, quien reseñó los hechos acontecidos el 26 de julio de
1953 y ofreció detalles de la participación en ellos de los jóvenes del
territorio y los asociados en cédulas del Movimiento 26 de Julio en la
demarcación.
La dirigente política afirmó:
“Este aniversario70 está lleno de razones
para celebrar. Hoy destacamos a muchas instituciones que apoyaron el desempeño
de nuestro municipio. Para ellos, para todos, nuestra felicitación y
agradecimiento, en nombre de las autoridades y de las organizaciones de masas.”
Los asaltos a los cuarteles
Moncada y Carlos Manuel de Céspedes aquel 26 de julio fueron el motor pequeño
que impulsó al motor grande; no significó el triunfo de la revolución en ese
momento, pero señaló el camino y trazó un programa de liberación nacional que
abriría a nuestra patria las puertas de la justicia social y al humanismo,
aseveró
La Revolución cubana y su pueblo, en homenaje
a los mártires de esta gesta, aquellos que hicieron eterna para la historia de
Cuba la mañana de la Santa Ana, necesita ahora más que nunca dar la batalla por
la defensa y la economía, destrozar y asfixiar los planes imperialistas,
fortalecer nuestra espiritualidad, nuestro civismo y decencia, nuestra
solidaridad hacia los humildes de todo el mundo, nuestra cultura en general,
como gran legado martiano de todos aquellos que conformaron la invencible
generación del centenario, dijo.
Esta jornada de celebración y
júbilo por el 26 de julio la viviremos convencidos de que hacemos todos los
días un poquito más por la paz, y entregamos de nuestras vidas un pedacito,
convencidos de que el pueblo lo merece, expresó la dirigente.
Al acto continuó una feria agroindustrial en el patio de la Casa de la Cultura, ubicada en las inmediaciones de la Plaza Roja. (Reyna C. Turro Caró)