Honran en La Habana a trabajadores azucareros

Honran en La Habana a trabajadores azucareros

Fue el combatiente internacionalista cubano Jesús Suárez Gayol (1936-1967) quien en 1965, siendo viceministro de Industria, entregó a un trabajador del sector azucarero por primera vez el Sello de Cincuentenario.

Reconocía así méritos relevantes en los resultados de la zafra o en la producción de azúcar en el país.

En los 58 años de acaecido ese acontecimiento, totalizan en Cuba más de 13 mil 500 los sellos entregados a hombres y mujeres del sector que han hecho aportes significativos al desarrollo de la economía nacional.

Al celebrarse este 13 de octubre el Día del Trabajador Azucarero, el salón Indio Naborí, de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), se vistió de gala para recibir a 69 cincuentenarios.

Se trata de macheteros, productores, dirigentes administrativos y sindicales -activos o jubilados- del grupo empresarial Azcuba, de cooperativas de producción agropecuaria y de unidades empresariales de base, a quienes les impuso el sello Ulises Guilarte de Nacimiento, secretario general de la CTC.

Antes de la actividad protocolar, Guilarte de Nacimiento habló a los trabajadores azucareros para hacer un recuento del papel que desempeñó ese sector en el desarrollo económico y social del país.

Honran en La Habana a trabajadores azucareros

Mencionó el rol de Jesús Menéndez Larrondo, el General de las Cañas, en sus batallas para defender la dignidad de los trabajadores azucareros, y cómo el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz prestó mucha atención al desarrollo del sector por la trascendencia en la garantía de la economía nacional.

En la jornada de homenaje al trabajador azucarero, se otorgaron medallas Jesús Suárez Gayol a mujeres con 20 años y hombres con 25 de labor ininterrumpida y otros méritos que los distinguen en sus respectivos colectivos laborales, y a otros que, ya jubilados, siguen aportando al perfeccionamiento del sector.

El encuentro entre generaciones propició sustanciosos encuentros con la historia, en los cuales los veteranos transmitieron sus experiencias a los jóvenes, que tienen la responsabilidad de seguir produciendo azúcar para aportar, con eficiencia y productividad, al bienestar integral del país. (Ramón Lantigua Arcis)

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