En vísperas del aniversario 504 de la villa de San Cristóbal de La Habana, las instituciones de la Oficina del Historiador de la Ciudad proponen actividades y eventos como parte de la celebración de la festividad.
Una de esas entidades es la Casa de África, ubicada en la calle
Mercaderes, del Centro Histórico, que desarrollará en sus predios, el próximo sábado
a las 10:00 (hora local), el Festival de Tradiciones y Costumbres Habaneras.
La cita, denominada La Habana de José Luciano Franco, reúne
a estudiosos y promotores de la cultura popular interesados en la transmisión
de valores compartidos acerca de la historia y las tradiciones culturales de un
lugar donde conviven generaciones de distintas épocas.
Suelen ser las tradiciones y
costumbres en esta era de la información en el planeta Internet, esenciales,
para comprender los hábitos, mitos, hechos y personalidades que a lo largo de
504 años han transmitido toda una herencia de ritos y prácticas culturales a la
identidad colectiva, refiere la emisora Habana Radio.
La Casa de África atesora en su interior varias colecciones de objetos,
imágenes visuales y documentos que atestiguan la presencia de una cultura tan
diversa y popular en tradiciones y costumbres que a lo largo de estos años ha
dejado una huella determinante en el proceso de la identidad de lo cubano, y en
especial, en los círculos de la sociedad habanera.
Constituye un pretexto ideal de esa institución de la Oficina del
Historiador para dedicarle el festival al profesor, investigador y periodista
cubano, José Luciano Franco, que se especializó en temas de la identidad
cultural africana, motivado por la rica y desconocida multiculturalidad
heredada en la isla.
José Luciano Franco y el primer
historiador de la ciudad Emilio Roig de Leuchsenring consideraron de suma
importancia estudiar los principales hitos de la sociedad cubana que iban trascendiendo
de una época a otra por la continuidad de los pasajes de la historia, que, en
el caso de la esclavitud negra, dejaría considerables relatos y narraciones en los
palenques, sublevaciones y conspiraciones que terminaron por dar un sello
peculiar a la identidad cultural de Cuba.
Regresar nuevamente a las raíces de la identidad es revisar el interior de las tradiciones y costumbres individuales de una comunidad como la habanera, lo cual ha favorecido a las familias como fuente de identidad, para conservar en la memoria significativos proverbios, recetas culinarias, ritmos musicales, poemas, formas de vestir y socializar, hasta más de una festividad popular, para advertirnos como fuimos, somos y debemos seguir siendo cubanos. (Redacción digital)