
![]() |
Foto: ACN. |
![]() |
Foto: Prensa Latina. |
Como parte de la ceremonia, se llevó a cabo una sesión solemne del Tribunal Provincial de La Habana, que, tras valorar pruebas y el testimonio de los familiares de los fallecidos, constató la culpabilidad del Gobierno de Estados Unidos en el vil acto.
El órgano recordó
que cerca las 15:00 (hora local) del 4 de marzo de 1960 ocurrió una primera
explosión con la potencia destructora de 31 toneladas de granadas y 44 de
municiones dentro de la embarcación, cargamento proveniente del puerto de
Amberes, Bélgica, con destino final en la capital
cubana.
Poco después, la
intención genocida de los autores de ese atentado quedó confirmada, al
registrarse una segunda detonación, precisamente cuando los cuerpos de ayuda,
Bomberos y la Policía Nacional Revolucionaria brindaban auxilio a los primeros
afectados.
El tribunal
subrayó que el saldo final de víctimas fue de 101 fallecidos, 400 personas lesionadas o incapacitadas de por vida
y 82 niños sin padres.
Recalcó que la
explosión de La Coubre “fue producto de un acto terrorista instrumentado por el
Gobierno de Estados Unidos, como parte de las acciones llevadas a cabo en esa
época, para desacreditar la naciente Revolución y desestabilizar el país, y no
un accidente aislado”.
Esa conclusión -apuntó-
fue ratificada este martes a partir de la práctica de la prueba pericial, en la
que un especialista en armamento explicó la imposibilidad de verse de manera
accidental, debido a la forma en que se suscitaron las explosiones y los
dispositivos que dieron lugar a estas.
“No se trató de un accidente,
como quedó probado, sino de un hecho intencional. Sabotaje preparado fuera de
Cuba, en el que estuvo presente la mano de los servicios de inteligencia
estadounidenses”, reiteró el órgano, quien calificó al hecho como un crimen de
lesa humanidad.
En nombre del
pueblo de Cuba y los familiares de las víctimas, el tribunal condenó la
política “de doble cara, desleal y racista” de Estados Unidos contra el país
antillano, la cual tuvo uno de sus capítulos más sangrientos la explosión del
buque, y hoy –denunció- se manifiesta con la aplicación de más de un centenar
de medidas coercitivas, como parte de la guerra no convencional.
Aseguró que,
frente a esos desafíos y ataques, prevalecerá la firmeza de Cuba y la Revolución.
Un día después del siniestro, el 5 de marzo de 1960, un multitudinario sepelio reunió a los habaneros en la intersección de la avenida 23 y calle 12, en las inmediaciones de la necrópolis Cristóbal Colón, para despedir a las víctimas.
![]() |
Foto: Prensa Latina. |
Frente a la multitud, el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, legó la consigna de “¡Patria o Muerte!”, mientras que el semblante firme de Ernesto Che Guevara era inmortalizado por el fotógrafo Alberto Korda para convertirse en símbolo de resistencia.
![]() |
Foto: Prensa Latina. |
ARTÍCULO RELACIONADO
Explosión en La
Habana del vapor La Coubre: jugada malévola del imperio
RSL