Miguel Díaz-Canel, presidente de la República de Cuba, asistió este jueves a la Misa de Acción de Gracias por el Pontificado del recién fallecido papa Francisco (1936-2025), realizada en el corazón de La Habana Vieja.
El homenaje se realizó
en la Santa Iglesia Catedral de La Habana, donde se congregaron los fieles para
rendir honores al sumo pontífice.
La Misa de Honor al Papa es una muestra de la comunión de la Iglesia cubana con el sentir del catolicismo mundial, tras el fallecimiento del Pontífice el pasado 21 de abril, subrayó la información.
En la celebración, se recordó el cariño y la cercanía de Francisco con Cuba y con su pueblo, añadió la cuenta de la Presidencia.
En la homilía de la celebración litúrgica, el Nuncio Apostólico recordó la vida de entrega a la humanidad del papa. No era solo el Santo Padre de los católicos, era un padre para todos sin distinción, con atención especial a quienes sienten que no encajan en ningún lugar, significó la reseña.
Honramos al Papa Francisco, símbolo de paz y cercanía a #Cuba. Su legado de diálogo y esperanza pervivirá en nuestro pueblo y el mundo. Agradezco al Nuncio Apostólico sus palabras en esta misa funeral por su santidad. pic.twitter.com/0iwFudah0T
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) April 25, 2025
CUBA Y EL LEGADO DEL PAPA FRANCISCO
Pocas horas después de conocerse la noticia del fallecimiento de Francisco, varios fueron los mensajes de la máxima dirección de Cuba, con condolencias a la comunidad católica internacional, agradecimiento por las palabras de afecto dirigidas por el sumo pontífice hacia el país caribeño y de reconocimiento al legado extraordinario que deja tras de sí, destaca un despacho de la Agencia Cubana de Noticias (ACN).
El papa Francisco falleció el pasado 21 de abril, a los 88 años de edad, en su residencia de la Casa de Santa Marta, en Ciudad del Vaticano, a causa de un ictus cerebral y complicaciones posteriores, tras haber luchado con diversos problemas de salud en las semanas anteriores a su deceso.
Francisco, de nombre secular Jorge Mario Bergoglio, fue el primer papa jesuita y el primero originario de América, además de primero no europeo desde el sirio Gregorio III, fallecido en el año 741.
El papado de Francisco se distinguió por la humildad, la adhesión a la opción preferencial por los pobres —principio que abarca a los marginados y sufrientes de distinta extracción— y el compromiso de diálogo con personas de diferentes orígenes y credos, concluyó la información de la ACN. (Redacción Digital. Foto: Facebook)
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