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| Roxana Mirabal, directora de la fuerza de trabajo. Foto Ramón Lantigua |
Roxana Mirabal Pérez ya acumula 26 años de labor ininterrumpida en la corporación Cuba Ron, donde se desempeña como directora de fuerza de trabajo.
Llegó a la entidad en junio de 1999 como especialista en recursos humanos para atender la actividad de salarios, relacionada con propuesta de plantilla, sistemas de pagos y de estimulación en CUC.
Diez años después, la gestión del conocimiento le posibilita a Roxana ocupar por designación la dirección de fuerza de trabajo, responsabilidad que le ocupa en la atención a la política salarial de la corporación, de las empresas roneras del país, de una entidad distribuidora y de una unidad empresarial de base (UEB) logística, además de sostener vínculos con las sociedades económicas internacionales como: Havana Club, Ron Santiago y Lefersa.
Le corresponde a la dirigente también tener vínculos de trabajo administrativo con las sociedades económicas 100 % cubanas como: La Estancia, Refrescos Las Lomas y Empiasa, donde hay personas especialistas en recursos humanos con los cuales se realizan importantes acciones de trabajo profesional y de superación, que se intercambian entre colectivos con especial atención a los jóvenes.
Roxana Mirabal Pérez es un cuadro de dirección en la corporación Cuba Ron, que cumplió el ocho de noviembre 32 años de fundada, creando fortaleza productiva y económica en beneficio de la industria alimentaria cubana, y cumpliendo importantes compromisos comerciales con el mercado internacional, sin descuidar la preparación de la reserva de cuadros con jóvenes trabajadores que tienen condiciones requeridas como: Christian Alexander Hidalgo Gómez y Lianet Suárez Ruiz.
No quedan exentos de atención el sector del turismo nacional y foráneo, así como el comercio interior, nuevas formas de gestión no estatal como: proyectos de desarrollo local, micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes), y otros renglones imprescindibles de la plataforma ronera.
Roxana asegura que desde hace 26 años tiene dos casas: una en la que vive y la otra, Cuba Ron, donde disfruta feliz de su vida social y laboral respectivamente, donde cada familia le hace sentirse una mujer integralmente empoderada.
Texto y fotos: Ramón Lantigua Arcis
SST