La Empresa del Papel (Cubapel), ubicada en el municipio de Boyeros, es de esas entidades donde los trabajadores y sus dirigentes concentran sus esfuerzos en aportar, más que en pedir o lamentarse frente a carencias o dificultades.
“Me voy orgulloso de esta fábrica que, con maquinaria recuperada de más de 40 años de explotación, no merma en la calidad de sus producciones. Variando y facilitando el trabajo de otros, han logrado rescatar y tener un lugar acogedor. Ha sido un orgullo visitarlos", expresó Luis Antonio Torres Iríbar, primer secretario del Comité Provincial del Partido Comunista de Cuba en La Habana.
El dirigente recorrió las instalaciones de la entidad (con el 40 por ciento de su fuerza laboral constituida por mujeres), la cual facilita servicios a micro, pequeñas y medianas empresas; proyectos, trabajadores por cuenta propia y cooperativas no agropecuarias.
Entre las producciones del centro, sobresalen los sacos para envasar cemento o carbón.
El recorte también es una opción, a fin de diversificar producciones: piñatas, cajas de buffet o de pizzas, entre otras.
En estos momentos, las mayores clientes son los dedicados al sector no estatal.
Distinguen a este colectivo la unidad, la responsabilidad y la búsqueda de alternativas para no afectar la producción, incluso ante el déficit de energía eléctrica, expresó Adalberto Cervantes Martín, director de la Unidad Empresarial de Base Envases papel y moldeado.
Lisset Cuevas Rodríguez, secretaria general del buró sindical en el centro, elogió el rol de los trabajadores para cumplir los parámetros de eficiencia, en lo que ha sido clave la atención material y espiritual a quienes son los protagonistas de los éxitos de la entidad. (Iliana Ortega Chávez)