Tras el paso devastador de Ian por la provincia de Pinar del Río, Cuba tiene puestos sus ojos y muchas de sus fuerzas sobre ese territorio que se levanta con esfuerzo tenaz, cuya recuperación se pulsa palmo a palmo y en chequeos permanentes que hace la dirección del país, como el que tuvo lugar este fin de semana desde el Palacio de la Revolución, encabezado por el presidente Miguel Díaz-Canel .
Una noticia alentadora fue dada en este último encuentro por la Primera Secretaria del Partido en Pinar del Río, Yamilé Ramos Cordero: a través de videoconferencia ella informó que, en cuanto al servicio eléctrico, ya el territorio estaba al 50,82 por ciento de recuperación.
Según detalló la dirigente, el municipio de Viñales ya está recibiendo energía eléctrica a través del sistema electroenergético; “o sea, que solo nos quedan los municipios de San Juan y Martínez, y San Luis, con grupos electrógenos. Ya el resto de los municipios de la provincia está recibiendo energía por el sistema electroenergético, en una parte”.
A propósito de esa afirmación el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista, destacó el hecho de que Pinar del Río ya cuente con más de la mitad de su servicio eléctrico recuperado. En tal sentido, hizo énfasis en afincarse en tal logro y seguir avanzando.
La Primera Secretaria del Partido en la provincia más occidental de Cuba detalló que, en lo referente a la recuperación del servicio eléctrico, “tenemos municipios como Mantua que ya está al 99,7 por ciento; Sandino al 98 por ciento; Los Palacios al 90 por ciento. Y continúan siendo más bajos San Juan —al 20 por ciento—, San Luis y Martínez al 25, Viñales al 32, y La Palma al 35”. Ella añadió que Consolación del Sur estaba al 33 por ciento; e informó que en todos los territorios hay brigadas trabajando en pos de avanzar.
En esta hora, según enunció Yamilé Ramos Cordero, el abasto de agua continua siendo “la preocupación principal de la población en Pinar del Río”; aunque, dijo, se acrecienta el número de personas que la están recibiendo.
Apuntó que “ya están todas las conductoras de la cabecera provincial funcionando”; pero llevará un tiempo, dijo, “poder empatarnos con los ciclos de distribución, y llegar a todas las personas que reciben por este sistema”. La dirigente partidista subrayó que “de igual manera se ha continuado reforzando la distribución de agua en pipas. Hoy se incorporaron otras pipas”; y las medidas de control se mantienen “para lograr que sea más efectivo lo que se está haciendo”.
Así precisó en un encuentro que también contó desde la presidencia con Esteban Lazo Hernández, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular; el primer ministro, Manuel Marrero Cruz; el vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa; el secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista, Roberto Morales Ojeda; así como el general de Cuerpo de Ejército, Álvaro López Miera, ministro de las FAR y Héroe de la República de Cuba. Todos; miembros del Buró Político.
Entre otros datos relevantes compartidos en la tarde de este sábado, Ramos Cordero dijo que en Pinar del Río seguían evacuadas 5 270 personas, y 1 393 familias. Y no pasó por alto la necesidad de que haya presencia de quienes tienen responsabilidades en cada lugar, para que la población pueda estar al tanto del “trabajo que se viene haciendo”; porque esa comunicación, recordó, es la que fortalece las esperanzas y mejora estados de ánimos.
Como cada provincia funciona con todo lo que lleva un país, Yamilé Ramos Cordero habló sobre los alimentos que se continúan distribuyendo; sobre la comida que se elabora y vende a la población —”sobre todo en las comunidades que más afectación presentan—; y sobre “unidades móviles de gastronomía que están yendo a los lugares”.
Movilizaciones hacia organopónicos y siembras de cultivos varios; aseguramientos de la campaña tabacalera; haber recuperado más de mil hectáreas de cultivo del plátano. De tales tareas habló Ramos Cordero, quien en lo alusivo al fondo habitacional informó que a la altura de este sábado había contabilizadas 101 401 viviendas afectadas por el paso de Ian. “Consideramos, expresó, que los números finales deben andar por el orden de las cien mil viviendas (con daños)”.
“Ya tenemos recuperadas, aseguró, 1 834 viviendas, y en el día de hoy se han continuado vendiendo materiales de las construcción. Ya tenemos más de 21 mil planillas listas para que las familias vayan a comprar; ya han comprado 3 126 familias. Hoy y mañana van a estar abiertos los puntos de venta de materiales de la construcción, y ha continuado fluyendo la entrada, con un incremento, de materiales de la construcción a la provincia”.
En las actividades de transporte, educación, cultura, salud, y deporte, añadió la dirigente partidista, continúan los esfuerzos recuperativos. Y en el caso de las comunicaciones, “la telefonía móvil está restablecida al 98,8 por ciento; y la telefonía fija, al 95,16”.
Sobre las donaciones que van llegando al territorio, Yamilé Ramos Cordero destacó que las mismas se van trasladando a sus destinos finales “en el menor tiempo posible”.
De Artemisa, y de otros conceptos cardinales
Sobre la provincia de Artemisa, otro territorio dañado por el paso del huracán Ian, su primera secretaria del Partido, Gladys Martínez Verdecia, informó a la dirección del país que, en cuanto a la recuperación del servicio eléctrico, el municipio de Bahía Honda ya había alcanzado el 91,25 por ciento.
A ese poblado, al cual se incorporaron este sábado nuevas fuerzas de apoyo, le quedan 1 482 clientes pendientes del servicio eléctrico, según informó Martínez Verdecia, quien además dijo que al municipio de San Cristóbal le quedan 405 clientes (con un 98,53 por ciento del servicio activado). La provincia, detalló, tiene una recuperación del 99,03 por ciento, con un total de 1 944 clientes pendientes del preciado servicio.
De las comunicaciones (ya recuperadas), de los materiales de construcción que han ido llegando, y de las 724 viviendas ya restauradas habló también la dirigente partidista. Y en ese estilo que va al detalle de cada tarea fue avanzando la reunión, en la cual todas las autoridades responsables con la recuperación de Cuba rindieron cuentas.
Ian dejó a su paso una traza de destrozos, pero también activó, como se dijo en el chequeo, muchas fuerzas que trabajan en obras de drenaje, de carreteras, de higienización; y en levantar, sin descanso, todo cuanto derribó el meteoro.
Como en una batalla cuya estrategia es ahora hacer las cosas mejor que cómo estaban antes del ciclón, y de paso hacer obras que estaban pendientes, iban teniendo lugar los análisis que dejaban en pie conceptos como la necesidad del control; o como el valor de que no quede un solo lugar al cual las autoridades no vayan.
Sobre esta última idea, el presidente Díaz-Canel hizo énfasis en la importancia de la comunicación con el pueblo, de dar en cada lugar la explicación necesaria; porque, como él reflexionó, adonde “no llegamos con alguien”, se provocan la incomprensión y el malestar.
El Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, compartió impresiones sobre su paso por escenarios como el Surgidero de Batabanó, ubicado en la provincia de Mayabeque: “Es una revolución lo que hay allí”, dijo. Y al contar sobre cómo el agua ha llegado a más de la mitad del pueblo, mientras la tarea relacionada con las viviendas avanza, valoró que “hay un cambio total, y además un movimiento fuerte”.
Sobre su paso por Artemisa y Mayabeque, sobre la gratitud del pueblo con todo lo que se está haciendo habló en la jornada Esteban Lazo, quien recordó una lección que ha quedado clara por estos días: “Para tener, hay que participar”. Lo dijo porque cuando se toma parte en la solución de los problemas, se acrecientan la responsabilidad y el sentido de pertenencia de la gente.
“En las visitas que he hecho en estos días —valoró Esteban Lazo— hemos encontrado ese ambiente de trabajo, de comprensión”. Y aseveró: “Hemos visto una satisfacción en la gente con que el país, el Gobierno, la Revolución se están ocupando de los problemas que están sucediendo”.
Hacia el final del Chequeo, y sobre ese tema que gravita decisoriamente en el ánimo popular, concerniente a la vocación de servicio que debe animar a quienes tienen responsabilidades, Manuel Marrero Cruz afirmó: “Nos hacen falta en estos momentos difíciles gente dispuestas a buscarse problemas, y gente que resuelvan los problemas”.