El Hotel Nacional de Cuba, en La
Habana, acoge desde este miércoles hasta el viernes la XXIV Conferencia de
Directores Iberoamericanos del Agua (Codia), con la participación de
representantes de 18 países.
En su primera jornada de trabajo, se realizó un Seminario de Alto Nivel que aborda los avances y retos en la mejora de la calidad del líquido y del tratamiento de residuales, en el contexto de la aceleración del Objetivo de Desarrollo Sostenible 6 Agua Limpia y Saneamiento, aplicado a la Meta 6.3.
Esa meta plantea mejorar la calidad del recurso, al reducir la contaminación y minimizar la emisión de productos químicos y materiales peligrosos, reducir a la mitad el porcentaje de aguas residuales sin tratar y aumentar el reciclado y la reutilización sin riesgo a nivel mundial.
Con intervenciones en plenario y
vía on line, se presentaron experiencias de trabajo de Argentina, Ecuador, Nicaragua,
Paraguay, Uruguay y República Dominicana.
Además, se escucharon otras de
manera virtual que dieron paso al debate, centrado en lo fundamental en el
manejo de la información y los datos, así como también lo imprescindible de
mejorar los indicadores que tributan a mejor calidad de vida para las personas.
El ingeniero Antonio Rodríguez Rodríguez, presidente del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos de Cuba (INRH) y presidente pro tempore de la Codia, refirió a Radio Ciudad de La Habana la importancia que le concede Cuba a esta cita:
En la mesa de debate sobre la
Meta 6.3, en la que participaron expertos de Guatemala, España, México, y de
varias instituciones, Leslie Llanes Santamaría, directora de Calidad del Agua y
Control de la Contaminación del INRH, de Cuba, ofreció una amplia información
sobre el manejo y protección de las aguas terrestres en la mayor de las
Antillas y el tratamiento que se realiza de las residuales.
La segunda mesa de debate analizó
el tratamiento seguro de las aguas residuales, reciclado y reutilización, con
la participación de representantes de Perú y Portugal, entre otros expertos.
En paneles, fueron las estrategias y mecanismos necesarios en la región para acelerar los financiamientos, datos, capacidades, innovación y gobernanza, además de la capacitación de los sectores calidad del agua y tratamiento de las aguas residuales. (Reyna C. Turro Caro)