En otra victoria trascendente de Cuba, Estados Unidos fue declarado culpable por violar los derechos humanos, tratados y leyes internacionales al aplicar el bloqueo a Cuba durante más de 60 años.
Tal fue el veredicto del
tribunal internacional que finalizó este viernes en el Parlamento Europeo un
juicio sobre el caso.
Esa política estadounidense de asfixia económica durante un largo
período y su grave repercusión en la vida de los cubanos clasifican como crimen
de genocidio.
Dado que las leyes
estadounidenses en las que se basa son ilegales, deben ser abolidas, afirma el
dictamen, y agrega que EE. UU. debe pagar una indemnización por el costo de los
daños al Estado cubano, a las empresas y a los ciudadanos.
Los jueces, presididos
por el alemán Norman Paech, anunciaron sus conclusiones después de considerar
las deposiciones de fiscales, expertos y testigos durante dos días, en los
cuales se sucedieron testimonios de los sufrimientos que el cerco económico
provoca en el pueblo y la economía de Cuba, y a terceros países por su carácter
extraterritorial.
El dictamen refiere que
el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales estableció que las
medidas económicas unilaterales afectan la distribución de alimentos y
medicinas y dañan el funcionamiento de los sistemas básicos de salud y
educación.
“La evidencia demuestra que estas consecuencias nefastas se han
producido en la vida de los cubanos”, ratifica el documento.
Una abultada relatoría de
las conclusiones de las deliberaciones de los jueces concuerda en las graves
afectaciones que causa al país caribeño la falta de disponibilidad de divisas
agravada por el intensificado bloqueo, política que también viola el derecho a
la salud por obstaculizar la importación de equipos médicos y de insumos y
productos farmacéuticos.
Igualmente, se ven
seriamente afectados la educación, la ciencia y la cultura, perjudicados por la
falta de equipos y materiales didácticos, y limitados los intercambios
científicos y culturales internacionales, agrega.
El bloqueo de EE. UU.
pone barreras al comercio de Cuba con otros Estados y a la importación y
exportación de productos, violando numerosas disposiciones del derecho
mercantil internacional, así como también las operaciones financieras.
Remarca el dictamen que
los efectos extraterritoriales del cerco imperial atentan contra la soberanía,
ciudadanos y empresas de otros Estados.
En la jornada final del tribunal, Fernando González Llort, presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, aseguró que los resultados de este ejercicio jurídico y político, han propinado una nueva y contundente derrota moral al gobierno norteamericano que no cesa en el empeño de doblegar a Cuba para borrar su ejemplo para muchos pueblos del mundo.
Exhortó a “gestar juntos
nuevas acciones, mucho más efectivas para demostrar el marcado carácter
extraterritorial del bloqueo”.
Puso de relieve que no
hay un solo argumento válido que justifique la arbitraria permanencia de Cuba
en la unilateral lista estadounidense de países patrocinadores del terrorismo.
La resistencia del pueblo
cubano y el apoyo de la solidaridad nos alientan a seguir adelante, añadió, y
concluyó con un llamado a hacer más efectiva la lucha contra bloqueo y a la
utilización del veredicto del Tribunal, como una herramienta de trabajo.
Aunque los resultados del juicio no son vinculantes, son considerados un relevante aporte para la consolidación y ampliación de la campaña mundial antibloqueo. (Tomado de la ACN)